Cables flexibles para el transporte y distribución de energía eléctrica en instalaciones fijas, protegidas o no. Adecuados para instalaciones interiores y exteriores, sobre soportes al aire, en tubos o enterrados. Acometidas, instalaciones de alumbrado público, instalaciones industriales en general y conexionado de máquinas.

Durante un incendio prolongado, los cables de Alta Seguridad (AS+) resistentes al fuego continúan transmitiendo energía eléctrica. De esta manera, garantizan el suministro eléctrico a los equipos de emergencia, como las luces que indican la ubicación de una salida de emergencia, los extractores de humo, los circuitos de ventilación de aparcamientos y garajes, las bombas de agua o las alarmas acústicas.

Diseñados para movimientos continuos de flexión y/o de enrollado para alimentar y contralar equipos móviles, como por ejemplo Grúas de carga y descarga en puertos industriales, ascensores, elevadores, transportadores y puentes grúas. Especialmente indicado para la interconexión entre un equipo o sistema móvil a una fuente de energía y de control. Debido a su diseño y los materiales que lo componen es apto para alimentar motores, controlar y monitorear el sistema en servicios móviles pesados a través de sistemas de guía de cable especiales, tales como enrolladores automatizados, sistema de guía por poleas, cestas o cortinas porta cables.

Diseñados para instalarlos en zonas donde se requieran protecciones electromagnéticas, aislar el cable de ruidos y aislar al resto de los aparatos eléctricos del cable. Disponible en diferentes tipos de pantalla, cinta de aluminio, trenza de cobre, cobre estañado, fleje de cobre, corona de hilos de cobre para variadores de velocidad etcétera. Con diferentes compuestos en su cubierta para su mejor comportamiento en el medio, temperatura, agua…

Los cables de silicona se caracterizan por una resistencia a altas temperaturas hasta picos de 250°C y al mismo tiempo con una flexibilidad permanente. Debido a la estructura molecular reticulada, los cables de silicona permanecen en su forma original también con influencia de la temperatura.
Los cables para altas temperaturas también se pueden utilizar para mantener la funcionalidad en caso de incendio. Los cables de silicona resistentes al calor se utilizan, por ejemplo, en plantas metalúrgicas, acerías y laminadores, para el cableado interno de luces o en el procesamiento de vidrio y cerámica.

Los cables para instrumentación son cables multiconductores que transportan señales eléctricas de baja energía entregadas por un transductor u otra aplicación hasta el proceso de control o analizador. Los cables para control son cables multiconductores que transportan señales eléctricas, usadas para monitorear o controlar sistemas eléctricos de potencia y sus procesos asociados, como: transformadores de corriente, transformadores de potencial, relés interruptores, equipos de medición, entre otros.

La transmisión de la información se unifica bajo un cable llamado cableado estructurado. El cableado estructurado es un cable de cables, es decir, es un cable compuesto por pares trenzados de cobre por los cuales se transmite información. Son cables trenzados con el objetivo de reducir la interferencia entre pares adyacentes. Como cada red de datos tiene unas necesidades concretas, existen distintos tipos de cableado y estos se agrupan según su apantallamiento y su velocidad de transmisión. Algunas de estas redes pueden ser más sensibles a las interferencias y por ello existen cableados con distintos apantallamientos.

Los cables de fibra óptica están compuestos por filamentos de vidrio, cada uno de ellos con capacidad para transmitir datos digitales. Envían información codificada de manera eficaz en un haz de luz a través de un tubo de vidrio o plástico. Tienen un rendimiento superior en lo que al ancho de banda se refiere y un mejor rendimiento a la hora de transportar datos.